Civil. (De izq. a der.) Gerardo, Anabella, Geri Krongold, Gregorio y Sari Werthein, y Marcela Gotlib
El pasado sábado 31 de marzo del corriente año, se casó Gregorio Werthein, que es uno de los hijos del poderoso empresario Gerardo Werthein (CEO de TELECOM) quien celebró la fiesta de casamiento en el Hotel Sheraton de Retiro, con una impactante y poderosa convocatoria política, como es el ex presidente norteamericano Bill Clinton, que según la fuente, llegó de incógnito a Buenos Aires para participar de la ceremonia pues la relación con los Werthein es de larga data: el clan suele pagarle un cuarto de millón de dólares por dar una conferencia al año.
También, según Diario Perfil Digital: "Clinton se movió por la fiesta como si fuera uno más, aunque una discreta custodia siguió cada uno de sus pasos. Al divisarlo, el canciller Héctor Timerman apuró el último niguiri de salmón que le quedaba y fue raudo a saludarlo. Cholulo, la emoción le impidió hacerle alguna consulta de política internacional."
La fiesta se prolongó hasta bien entrada la madrugada, con abundante champagne y barra de tragos. El broche de oro fue la presencia de Pitbull, el cantante cubano-americano que sacudió la pista de baile con un puñado de sus pegadizos hits.
Clinton, Macri, Timerman y Tinelli,
todos presentes en el casamiento de GREGORIO WHERTEIN
Por su parte, el Diario Minuto Político digital publicó: "La puesta en escena era imponente, sobre todo la pista de baile que se cubrió con placas que daban un efecto oro. Los salones del hotel se ambientaron con diferentes decoraciones y se dispusieron unas treinta hechas a medida, que impresionan y Gregorio Werthein y su ya esposa –se casaron el martes en el civil de Palermo– no quisieron ocupar una mesa principal sino que optaron por disponer de un living muy canchero con sillones de cuero blanco. Pero para muchos de los poderosos integrantes de la colectividad, uno de los invitados especiales es Admor, quien según lo definió un empresario argentino que lo conoce y visita “es hombre muy especial, extraordinario, que está más arriba de la definición de rabino”. Este personaje a quien muchos respetan y consultan como un guía espiritual –incluso como a un oráculo– vive en la isla de Malta, pero no tiene templo. Admor ya estuvo en enero pasado para asistir al cumpleaños de otro Werthein, Adrián celebró sus años con una megafiesta en La Rural. Esa vez, se ubicó una especie de jupa –la representación de la casa donde se ubican los novios y el rabino durante el oficio religioso del casamiento– con cortinas y dentro de ella unas dieciocho personas. En un momento de la fiesta, para sorpresa de los invitados que no sabían quién era, comenzó a formarse una fila para ingresar a esa jupa y ver a Admor. Si como imagen empresaria la presencia de Bill Clinton –invitado pero de presencia no confirmada hasta el cierre de esta edición– hubiera servido para demostrar la relación filantrópica que une a Gerardo Werthein con el ex presidente, la de Admor es mucho más valorada entre los miembros poderosos de la colectividad."
